Todo comienzo siempre es duro. En este caso me refiero a los inicios en el camino de la escritura.
Mis peques se inician en ello realizando "caminitos" rectos, curvos, circulares...pero lo hacen en un soporte especial: una bandeja con harina.
¡Qué duros inicios!
Con ver sus caritas os podéis hacer una idea...(je, je)
Con ver sus caritas os podéis hacer una idea...(je, je)
Al final dejamos la clase "como los chorros del oro".
¡Voluntarios y voluntarias no faltan!
¡Voluntarios y voluntarias no faltan!
Me encantan las caras que ponen al tocar y disfrutar con la harina.
ResponderEliminar¡Qué bien se lo pasan!
Y lo que más me gusta es la segunda parte. La de recogida y limpieza. Así tiene que ser, que sepan que la clase ha de quedar razonablemente limpia siempre.
Abrazos de monstruito!!
Ja, ja sí que lo pasan mal, sí señor. Una forma genial de que aprendan, Rosario. Un abrazo.
ResponderEliminarQue lujo poder ver cómo disfrutan, esas caritas no tienen precio.
ResponderEliminarEs una forma muy chula y divertida para que empiecen a hacer los trazos.