La semana pasada mis peques llegaron a casa con una misión por cumplir: debían de investigar, con ayuda familiar, el significado del nombre de nuestro colegio.
Enseguida han empezado a llegar vuestras investigaciones. Así que los peques en la asamblea nos van "leyendo" los resultados.
Parece ser que antes a este cole acudían los hijos de los ferroviarios (que son las personas que trabajan en los trenes).¡ Pero en realidad acudían al edificio que está al lado de nuestro cole!
Así que salimos a comprobar si eso era cierto.
¡Es verdad! Al lado de nuestro colegio hay un edificio antiguo: ese era en su origen el colegio Ferroviario.
Comentamos todo lo que veíamos: los colores, el tamaño de las ventanas...y también imaginamos dónde debían de estar las clases de los pequeños, cómo deberían de estar por dentro...
Nos fijamos en el estado en que se encuentra: cristales rotos, pintura deteriorada...pero a pesar de eso muchos decían que les gustaba más ese edificio que el actual.
¡Pues habría que ver bien la fachada de nuestro cole para tener las ideas claras acerca de cuál nos gustaba más!
Nos llamó la atención las banderas, los colores del edificio y que no había ventanas en la fachada.
Resultó que la clase estaba dividida entre los que les gustaba más el cole antiguo y entre los que preferían el de ahora.
Desde la lejanía pudimos apreciar que unos hombres con casco estaban arreglando la fachada del antiguo colegio.
Y después de estas observaciones nos volvimos ordenadamente a la clase.
Es curioso cómo después de realizar esta actividad, cada vez que salimos al recreo, los peques se fijan en el edificio antiguo y comentan cosas de él como si lo hubieran visto por primera vez, a pesar de haber pasado por delante de él desde que empezó el cole.
¡Menudo seguimiento le van a hacer a las obras de mejora, je, je!
Vaya grupo de investigadores! Por las caras veo que no se les escapa detalle!
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