Nuestra clase está organizada en rincones de juego-aprendizaje. En cada uno de ellos se realiza una actividad. Hasta ahora mis peques acudían libremente a su rincón favorito hasta un nº limitado de plazas: su foto era la llave que les permitía el acceso al rincón y si no había sitio en el cartel correspondiente, debían ir a otro rincón.
RECORDAR, ACEPTAR y CUMPLIR estas normas no es tarea fácil para unos niños tan pequeños ¡pero lo han hecho muy bien!
Esto de acudir libremente a cada rincón me ha servido para conocerles mejor y saber cuáles son sus preferencias.
Pero ahora me interesa que todos pasen por todo los rincones y realicen las diferentes propuestas que se ofertan en cada uno de ellos, así que he variado un poco la organización:
Cada día de la semana se repartirán los 5 equipos en los cinco rincones. A medida que avance la semana, irán rotando, de tal modo que el viernes todos los equipos habrán pasado por todos los rincones.
Para ello he elaborado el siguiente cartel (ya lo utilicé con mis anteriores criaturillas):
El lunes pasado empezamos con esta organización.
Aceptar que ya no pueden elegir el rincón, supone una renuncia a sus deseos; pero aun así han acudido al rincón que les tocaba sin enfadarse, je, je. Además esta rotación les ayuda a ir interiorizando el paso del tiempo pues empiezan a calcular qué día les tocará su rincón favorito.
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