PARA ENTRAR A UN TEATRO NECESITAMOS ENTRADAS

Aunque para ver nuestra obra de teatro no hay que pagar, no suele ser esto lo habitual. Es necesario llevar una entrada ¿verdad?
Así que hemos llevado al cole entradas de diversos sitios para ver analogías y diferencias entre ellas.
En primer lugar, cada niño nos ha enseñado su entrada y, antes de explicarnos a qué lugar se podía acceder con ella, el resto de compañeros especulaba si sería una entrada a un acto deportivo, a un museo, a los toros.... según el aspecto de la entrada (ya que muchas llevan imágenes).

Todas ellas se han ido pegando en un cartel para, en un segundo paso, analizar los aspectos comunes a todas ellas.
Este cartel se colocó a la altura de los niños para facilitar su visualización y propiciar que se acercaran a observarlas y hablar sobre ellas, en cualquier momento.

Finalmente se llegó a la conclusión de que en todas (o casi todas) las entradas aparece:

• El nombre del espectáculo o lugar al que acceder con ellas.
• El lugar (fila y asiento) que debemos ocupar.
• La fecha y hora a la que tendrá lugar el espectáculo.
• El precio.
• Una imagen alusiva al lugar o espectáculo al que vamos a pasar.

Y para que los niños comprobaran la necesidad de la entrada y de que en ella aparecieran reflejados algunos datos como el asiento que deben ocupar, la "seño" Gloria y yo dramatizamos cómo sería la entrada a un teatro sin tener adjudicado previamente el asiento...¡menudo lío!

Ya sabíamos que era mejor tener entradas con el asiento predeterminado pero ¿cómo podíamos localizar nuestro asiento en un gran teatro o cine? Deberíamos tener muy clara la serie numérica, qué nº va después de uno determinado, por dónde empezamos a contar las filas...Uff ¡un lío! Esto lo teníamos que ver muy clarito, para ello lo debíamos vivenciar.

Así que se aprovechó que el viernes disponemos del aula de psicomotricidad, para utilizar los bancos suecos y convertirlos en los asientos de nuestro teatro particular.
Para ello la "seño" Gloria preparó:

•  Unas tarjetitas con los números del 1 al 7 (cada nº se repite 4 veces).
•  28 entradas muy sencillitas, en las que figura la fila y el asiento que le corresponde a cada entrada.
• 4 bancos suecos.

El proceso seguido consistió en:

• Repartir a cada niño una tarjeta con un nº del 1 al 7.
• Estas tarjetas iban a servir para numerar los asientos, así que se ha ido llamando a los niños que tenían el mismo nº y ellos los han colocado en sus sitios correspondientes.
• A continuación se repartieron las entradas, y los niños debían localizar dónde ponía FILA y dónde ASIENTO.
• Posteriormente, por equipos, fueron pasando al teatro y cuando la taquillera les pedía la entrada, también les preguntaba qué a qué fila y a qué asiento iban. Después de localizarlo, se sentaban para ver la función.

BUSCANDO NUESTRO ASIENTO - Video Maker

De vuelta a clase los peques, como trabajo individual, completaron una entrada: debían poner el título de la obra que iban a ver y escribir el nº de fila y de asiento  que ellos quisieran. Finalmente dibujarían algo relacionado con el espectáculo al que podían pasar con esa entrada.

Con esta actividad, además de conocer cómo se organizan los asientos en un teatro o cine, se aplicaron sus conocimientos acerca de las serie numérica en una situación de la vida real. ¡Y lo mejor de todo es que los peques se lo pasaron fenomenal!
La verdad es que poco a poco vamos conociendo más cosas relacionadas con el teatro.