Emma siempre está enfadada, a veces ni ella misma sabe por qué. Pero su papá y su mamá le ofrecen soluciones para gestionar ese enfado y relajarse.
Un cuento para, entre otras cosas, hablar de emociones y de cómo las podemos gestionar.
¡Ah! A mis peques les ha encantado.
Tiene muy buena pinta, Rosario. Gracias por compartirlo. Un beso.
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