El ritual que seguimos con todos los homenajeados es el mismo...y creo que les encanta. Como ya os he comentado, les gusta sobre todo escuchar la historia sobre su nacimiento.
Así que Rubén ha disfrutado escuchando las canciones de felicitación, recibiendo los cariñosos besos de sus compañeros...y compartiendo las ricas galletitas con las que celebramos todos los cumples.
¡Ah! Y también ha recibido sus 4 tirones de oreja ¡más uno de regalo!
¡MUCHÍSIMAS FELICIDADES, RUBÉN!
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