El buzón de la amistad apareció en la clase de la mano de nuestro MONSTRUO DE COLORES.
Surge con la idea de motivar a los peques hacia la escritura. La idea es que escriban mensajes a sus amigos de forma totalmente voluntaria y sin la supervisión de ningún adulto. En todo caso son los propios peques los que se ayudan entre ellos.
De todos modos para facilitarles aún más la labor he colocado dos carteles extraídos de MUNDO DE RUKKIA. Así se pueden inspirar en esas tarjetas para escribir sus mensajes.
El viernes es el día en el que la reina o rey , junto con 1 o 2 ayudantes, abren el buzón y reparten las cartas.
Es importante escribir a quién va dirigida y quién la escribe. Yo no quise insistir en ello pues quería que ellos tomaran conciencia de la conveniencia de poner esos datos.
Y así ocurrió cuando, al intentar repartirlas, en algunos casos no sabían quién era el que la había escrito y quién era el destinatario...
¿Y qué ocurre con los que no reciben mensajes? Es raro que ocurra pues tienen una semana para ir llenando el buzón y al final siempre hay al menos una carta para cada uno, pero es conveniente, por si acaso, tener algún mensaje preparado para meterlo con disimulo en el buzón...
Si os habéis dado cuenta el objetivo de la actividad no es solo que los peques escriban, ante todo valoro el aspecto emocional: aumentar el sentimiento de pertenencia al grupo, fomentar la ayuda entre iguales, disfrutar de la amistad y de sentirse bien con los amigos...
¡Os aseguro que les encanta! A mí me ha sorprendido que voluntariamente opten por coger lápiz y papel y se pongan a escribir, en lugar de realizar otras propuestas más lúdicas.
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