Después de haber ayudado a nuestro amigo el alienígena, recibimos la siguiente carta:
Si ya antes de recibir la carta mis peques estaban preocupados por el futuro de nuestro planeta, imaginaos ahora.
Todos estuvieron dispuestos a seguir el consejo pero lo que más les emocionó fue el que mencionaran a Darío, je, je.
Y al día siguiente, uno de los duendes del parque, que estaba al tanto de nuestra nueva misión, nos propuso una ruta para conocer bien el parque.
Aunque no nos explicó mucho... ¿Qué significarían esos números?
Al ver que había 5 mensajes mis peques decidieron que había que trabajar por equipos, y así se agruparon.
Finalmente se dieron cuenta de que los números indicaban la ruta a seguir.
Les propuse que la dibujaran en el plano para que tuvieran más claro el camino a seguir.
Ellos solos fueron cediéndose el turno para que todos pudieran dibujar una parte del trayecto.
¡Qué bien se organizaron!
Como todo estaba claro, nos pusimos en marcha.
La seño Belén nos acompañó y ella se encargó de ir tomando fotos de todo lo que vimos.
El plano del parque lo realizó nuestro compañero y Secretario, Juan Pedro.
(Yo le he hecho algunas modificaciones para adaptarlo a los cambios del parque).
La fuente de la Primavera estaba llena de renacuajos, así que nos sentamos para verlos mejor...¡aunque se asustaron al vernos!
Pasear por el parque y conocer algunas curiosidades sobre las esculturas y las fuentes que lo adornan fue un placer.
Para rematar la salida y por petición popular (esto ya es una tradición, je, je) hicimos una carrera.
¡Lo habéis hecho genial!
En clase, preparé una zona para colocar el plano, y alrededor de él las zonas que fueran conociendo.
La biblioteca se llenó de libros y materiales interesantes relacionados con el proyecto.
Y, aunque no se ve bien en las fotos, también preparé una zona con el KIT de entomólogo. Les encanta salir al recreo y capturar algún bichito para estudiarlo en clase y devolverlo después con su familia.
