Mirad la nueva adquisición para nuestra biblioteca:
La rescaté estas Navidades de una tienda de juguetes momentos antes de que fuera al contenedor azul, je, je. (Por supuesto fue desinfectada y estuvo en cuarentena durante todo el periodo vacacional).
A los peques les dije que allí íbamos a colocar los cuentos y libros de nuestra biblioteca clasificándolos por temas, pero habría que hacer unos carteles para recordar qué libros van a un casillero u otro.
Esto lo comenté en la asamblea pero ya no lo volví a mencionar.
Un día, Juan me recordó que aún no habíamos hecho los carteles y que él se iba a poner a hacerlos. Nahia, una de sus compañeras de equipo, dijo que también se ponía a la tarea. Después se unieron más compañeros.
Como quedaron casilleros libres, cuando llega algún libro que no encaja en ninguno de los apartados existentes, son los propios peques los que cogen un trozo de papel y escriben el rótulo.
Los últimos que han puesto han sido: "ESPACIO" y "ALIENÍGENAS"...
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